El mantenimiento de las fachadas exteriores de los edificios es fundamental para salvaguardar el buen estado del interior de las viviendas. Los tratamientos más habituales son los que comprenden antihumedades, sellados de fisuras, rejuntado de ladrillos…, pero siempre finalizando con varias manos de pintura de revestimiento para proteger la fachada de los cambios climáticos que la deterioran.
Repara la fachada en pocos días y sin andamios
En esta ocasión, además de los trabajos verticales, también llevamos a cabo la instalación de andamios, si los espacios destinados a su colocación lo permiten. En ocasiones por la dificultad del trabajo o las características de las labores de mantenimiento tenemos que usar andamios aunque en el mayor porcentaje de los casos de trabajos de revestimento de fachadas que hacemos los llevamos a cabo sin estructura alguna.